Voluntaria de la Asociación Española contra el Cáncer en Valencia
- Autor/a
- Ana
Es una historia de
Ana
Entrevista con Ana, voluntaria de la Asociación Española contra el Cáncer en Valencia.
A través de sus palabras podremos hacer un retrato de este momento tan desconocido del ser humano: la muerte, desde el punto de vista de un acompañante a pie de cama.
* La muerte es el vocablo menos correcto de la sociedad porque está asociado al terreno de las tinieblas, y para ti qué es? “Para mí la muerte es una nueva puerta que traspasar y eliminar el miedo se convierte en un aspecto fundamental de la vida, ya que es lo que nos hace sufrir. Es una transición que hay que vivir con confianza” Así define Ana, su idea de la muerte.
Nuestra labor consiste en cubrir el espacio de atención afectiva, porque lo que realmente necesitamos en esos momentos es Amor, el amor transforma cualquier dolor en paz.
La actitud de un acompañante se concreta en: estar con él, escuchar sin dar consejos sin juzgar y respetando las situaciones personales; permitir que exprese sus temores, preocupaciones y tal vez, los temas pendientes.
Las posibles actividades del voluntari@
- Hacer compañía, estando el tiempo que se crea necesario
- Ayudarle a comer, caminar, leerle algún libro..
- Ir a comprar alguna cosa que necesite
- Acompañarlos a una prueba o tratamiento concreto
- Dar soporte a la familia, que también necesitan consuelo, acompañar y escuchar al familiar
- Canalizar las posibles preguntas que se les hagan hacia los profesionales del equipo asistencial.
Ana se formó a través de charlas, cursos y reuniones periódicas, para trabajar personalmente sus dudas, temores, angustias y también, compartir los buenos momentos que surgen de estas relaciones. No está de más, pero el sentido común de cada voluntario es lo que debe guiar la acción en cada circunstancia.
Nunca he intentado averiguar se tienen o no creencias espirituales, es lo menos importante para mí. Les intento reconfortar como me nace espontáneamente en cada momento.
Ser más conscienente de la verdadera realidad de la existencia, eso es lo que he aprendido durante todo este tiempo de voluntariado. El miedo a este momento vital creo que es una actitud fundamentalmente cultural y deberíamos cambiar esta visión de la muerte que nos tiene aterrorizados.
* ¿Qué puedes decir de la conducta y reacción de los moribundos? Los enfermos terminales tienen mucha paz, muchos resignación; otros creen que se van a recuperar y por eso no se preocupan demasiado por su enfermedad, y algunos pocos muestran una valentía admirable.
* Ante la cuestión de que realidad ha visto en los cuidados paliativos en los hospitales hoy en día, responde que echa en falta un entorno más intimo, más tiempo de atención, más voluntad de atención, más consciencia de la situación real.
Ana y yo nos encontramos en India, y allí compartimos nuestra disposición a hacer este tipo de voluntariado con enfermos terminales, para lo que solo se necesita elaborar tu propia muerte, tiempo para ofrecer, y afecto, mucho afecto. Gracias Ana a ti y a tantos voluntarios que anónimamente están ahí, donde la humanidad les necesita.
Experiencia obtenida en:
http://ultimotabu.iespana.es/testimonios.htm