Mi voluntariado en la Eco-Finca de la Asociación Andar
- Autor/a
- Sofie
Es una historia de
Sofie
Cartagena es una pequeña comunidad agrícola fuera de las rutas turísticas, un lugar tranquilo y autentico. Sus habitantes son muy buena gente, alegres, abiertos y fui acogida como princesa por doña Dorila, “mi mamá tica”. Dorila vive rodeada de sus hijos y nietos, quienes me aceptaron rápidamente como parte de su familia, compartiendo juegos y baños en el río con los niños, preparando las tortillas, celebrando el cumpleaños de la nieta…y jugando fútbol, por supuesto!
En la Eco-Finca de la Asociación Andar se cultivan –sin ningún químico- plantas medicinales y alimentos. Ahí pude, además de los trabajos de campo, aprender como se hacen los abonos y los insecticidas naturales.
También descubrí las plantas medicinales y sus usos, e hice un herbario. Gran parte de la Finca se dedica a la protección del bosque tropical húmedo, en el cual pude observar numerosos árboles, bejucos, pájaros, ranitas rojas y azules, etc.
Aprendí muchísimo sobre la flora y la fauna de esta parte de Costa Rica, pero también sobre la cultura tica, gracias a la amabilidad y generosidad de todos con quienes he vivido y trabajado. Quiero decirles a todos muchas gracias por haber hecho de estas tres semanas un tiempo muy placentero.
Experiencia obtenida de la
Asociación ANDAR