CEMEFOS maravillosos

Autor/a

Carlos Andrés Rossell Trujillo

País

México

Es una historia de Carlos Andrés Rossell Trujillo

Dicen que no hay que entender, basta con querer para que las cosas salgan tal y como deben. Hoy, hoy escribiría mi experiencia como relator en la reunión anual del CEMEFI, pero no, elijo mejor escribir una experiencia de vida, de vida plena, de amigos que, aunque distantes en lo físico, sabemos que estamos juntos en el pensamiento y claro está gracias a estas cosas de la tecnología. Fueron sólo cinco días de convivir, de compartir, de reir, de vivir. Qué poco y qué exagerados dirán algunos, pero a ellos he dedecirles que sólo cinco picos le bastan a una estrella para brillar intensamente y hoy, todos los que formamos parte de esta experiencia de vida, tenemos nuestra propia estrella, nuestra grande y brillante estrella: Guillermo. Su risa, su paciencia, su ánimo, su enseñanza y su gran e inmensa capacidad de admiración hacen que aquí y ahora esa estrella nos guíe por el camino de la unión, la esperanza, la aventura. Si la reunión anual per sé marcó un escalón en mi vida, el que en ella haya conocido a alguién que, a lo mejor hoy no lo sé, pero quizá su última misión en esta vida era ayudarme, darme un consejo o simplemente decirme que nunca cambié, por ese simple hecho, estos cinco días, estos cinco instantes, jamás podrán ser borrados de mi memoria. Gracias Guillermo. Desde Sonora hasta Quintana Roo va todo nuestro cariño para ti, Buen viaje amigo y que Dios te bendiga.