Joven voluntario en Christel House
- Autor/a
- Edgar Bueno Garcia
Es una historia de
Edgar Bueno Garcia
El siguiente texto fue leído en la inauguración formal de Christel House de México, A.C., el lunes 17 de enero de este 2005, como escuela incorporada a la Secretaría de Educación Pública
Edgar tiene 16 años, es ex alumno de Christel House y es voluntario en el área de Educación de CH. Asiste al bachillerato por las tardes, mientras que por las mañanas dona su tiempo y talento a la institución. Además, sigue participando en el programa sabatino de exalumnos – en donde recibe capacitación para al trabajo, computación, inglés, arte y orientación vocacional
En estos tiempos de barreras de convivencia social son evidentes: Hay demasiada violencia, discriminación social, falta de ética, irresponsabilidad, la falta de conciencia en casi la mayoría de las personas, pero sobre todo la violencia infantil.
Christel House ha decidido luchar por mejorar la calidad de vida de muchísimas familias; desgraciadamente los gastos que se originan son demasiado altos pero con esto y otras cosas en contra, la institución no se da por vencida, sin olvidar a todas las personas que también se han esforzado hasta ahora por sacar a los niños y niñas adelante y otorgarles una calidad de vida diferente, preparándolos y haciéndolos personas autosuficientes, productivas, responsables y capaces de salir adelante en esta sociedad. Pero esto no seria posible sin los apoyos de la señora Christel de Haan y de todas las personas que han ayudado a la institución
Es por eso que doy las gracias por todo lo que hacen, ya están contribuyendo con nuestra educación y nosotros nos comprometemos a esforzarnos.
Y aunque tal vez yo no pueda ayudar económicamente a Christel House, siempre me he preocupado por dar mi mejor esfuerzo en los proyectos que esta lleva a cabo.
Algo que para mí es importante mencionar, son las oportunidades que me han dado para mi crecimiento como persona.
Como fue la participación en los foros, en las actividades, el poder ayudar en las tareas cotidianas, el compartir y aprender de los maestros y niños con los que convivo diariamente, pero sobre todo retribuir dentro de mis posibilidades la ayuda que he recibido constantemente.
Otro aspecto que me hace sentir orgulloso es que aquí se nos da a todos los niños y niñas un trato digno, junto con la atención y el apoyo que recibimos de todo el personal: ya que se percibe un ambiente amable, respetuoso y de confianza por mencionar algunas.
Y puedo asegurar qué los niños se esfuerzan al máximo porque todas las personas que aquí laboran se preocupan por La misión, los objetivos y la lucha constante que la institución hace por sacar a los niños adelante sin distinción alguna.
Lo más valioso que tiene Christel House, dentro de su equipo de trabajo, son todas las personas que aquí laboran, ya que se vive en función de la armonía y la comunicación que siempre están presentes.
Para mis papás es algo muy importante y valioso ya que ellos creen que es una oportunidad que no siempre hay en la vida.
Por todo esto y muchas cosas más, doy mi mayor esfuerzo para alcanzar todos los objetivos.
